¿Por qué hay tantas hormigas voladoras?
Cada año Extremadura se llena de estos insectos tras las primeras lluvias de otoño, un fenómeno normal en esta época
Seguro que en los últimos días, con la llegada de las primeras lluvias de otoño, has visto una gran cantidad de hormigas con alas por varias partes de Extremadura. No te asustes. No es nada raro y no suponen ningún peligro. De hecho, es algo normal en esta época. Es un fenómeno que se repite cada año.
Estos episodios de invasión de hormigas voladoras forman parte de un acontecimiento natural y biológico de estos insectos: se trata de su proceso de reproducción. Y, de forma habitual, estas hormigas aladas acaban plagando la ciudad: aparecen en grupo porque su apareamiento se produce así. Hasta que el ciclo de reproducción termine, las seguiremos viendo por las calles y plazas.
Para salir todas a la vez seleccionan el momento en el que las condiciones de humedad y temperatura son más adecuadas: tras las lluvias, que ablandan la tierra para excarvar en ella con mayor facilidad; y con temperaturas elevadas, que permiten a las hormigas volar más fácilmente.
Todo comienza cuando caen los primeros chubascos y el terreno se empapa de agua y ablanda. En ese momento es cuando las hormigas abandonan con mayor facilidad su hormiguero, que está enterrado, con el objetivo de formar una nueva colonia. Se trata de un periodo de apareamiento para estos insectos y por esta razón algunos ellos desarrollan unas alas. En unos días aprenden a volar, encuentran una pareja, se convierten en viudas y, si sobreviven, son coronadas como reinas.
Las temperaturas están también relacionadas con este proceso, es el momento en el que les salen las alas.
Se trata de una eclosión sincronizada. Coincide en el tiempo y por eso salen todas a la vez. Los vuelos se ajustan entre los nidos de todas ellas. Lo necesitan para maximizar las posibilidades de apareamiento con las hormigas de otras colonias y para reproducirse con mayor efectividad, aprovechando que tienen menos dificultades para hacer sus nuevos nidos. De hecho, hay una posibilidad más alta de que una reina se encuentre con un macho de otro nido.
Cada hormiguero tiene una sola reina, que es la que pone los huevos. Algunos son normales y nacen hormigas estériles. Otros huevos son especiales. De ellos surgen las hormigas que pueden reproducirse (futuras reinas y zánganos). Estas son las que sacan las alas y vuelan en esta época en busca de pareja. Las hormigas obreras son básicas para la supervivencia de la colonia. Son las encargadas de llevar el alimento al hormiguero, especialmente granos, y defender la zona como soldados.
Mueren
Seguro que también habrás visto muchas de estas hormigas muertas en el suelo de las calles, pegadas a las paredes y en balcones. ¿Por qué mueren? Se trata de los machos que, después de reproducirse, fallecen.
Quedan vivas las hembras. Las que sobreviven, pierden las alas, escarban con mayor facilidad en la tierra mojada por las precipitaciones para buscar un sitio en el que poner los huevos y formar un nuevo hormiguero. Y es ahí donde el ciclo vuelve a empezar.
¿Por qué hay tantas hormigas voladoras?